Transportistas autónomos canarios denuncian el aumento de impagos
El retraso en el pago de los servicios de transporte es uno de los graves problemas históricos del transporte de mercancías por carretera, especialmente para el transportista autónomo. El último colectivo en plantarse frente a este abuso ha sido un grupo de transportistas autónomos canarios apoyados por la Asociación de Transportistas Canarios, ASTRACAN, hasta lograr el compromiso de pago inmediato.
Los transportistas autónomos que trabajan habitualmente para el operador logístico El Palmar 2005 S.L., que entre otras actividades presta servicios para el ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, dijeron basta el pasado 27 de mayo. Pararon sus vehículos en la entrada de la empresa como protesta a los cinco meses de retraso en el pago de los servicios. No estaban solos, les apoyaba la Asociación de Transportistas Canarios, ASTRACAN, que a su vez como miembro de FENADISMER estaba asesorada por ésta última.
Rubén Pérez, portavoz de ASTRACAN, resume los acontecimientos que motivaron la acción de presión: “los compañeros llevaban meses reclamando el pago de los servicios sin que la compañía, El Palmar 2005, atendiera sus peticiones. Lo peor es que les hizo acudir varias veces a la sede, con la promesa de que les iban a pagar, para encontrarse que era poco menos que una tomadura de pelo”.
Para el portavoz de ASTRACAN la situación era “insostenible”, ya eran cinco meses sin cobrar y además con la sensación de que “se les estaba faltando al respeto. Los dueños de la compañía nunca han dado la cara, era su abogado quien prometía pagar con un pagaré a 90 días. O sea además de los retrasos acumulados, tenían que esperar tres meses más para cobrar, ¿qué transportista autónomo aguanta?. Es imposible, no podrían hacer frente a sus propios costes”.
Finalmente, al menos de momento, este grupo de autónomos de Gran Canaria ha logrado su propósito. El pasado jueves 29 de mayo les han pagado a través de un talón. “Han abonado una parte de la deuda, pero creemos que los problemas con esta compañía seguirán. Han demostrado que son poco serios, por lo que seguiremos muy atentos en la asociación a lo que suceda”, explica el portavoz.
Ruben Pérez asegura, asimismo, que “aunque este caso es un poco más grave de lo normal, el retraso y la morosidad en el cobro de los servicios de transporte son habituales, llevando a muchos compañeros al borde de la desaparición cuando no han tenido que cerrar su empresa sin más”.
Más impuestos
El problema de cobrar con retraso los servicios prestados no es el único que tienen los transportistas canarios. En este momento están más preocupados, incluso motivó la convocatoria de una huelga que finalmente fue suspendida, por una posible subida de impuestos que el Gobierno autonómico les quiere implantar y que afectaría directamente al consumo de combustible.
Rubén Pérez asegura que la situación de los transportistas canarios, sobre todo los autónomos, es muy complicada: “Más de 2.000 autónomos han desaparecido en el último año entre mercancías y viajeros”. En cuanto a la política seguida por el Gobierno canario en materia de impuestos, Pérez indica: “Parece que no es suficiente con los más de 1.800 millones de euros que han recaudado en el último ejercicio con el sector del transporte. Al menos no lo es para los Cabildos que han planteado un nuevo impuesto de dos céntimos por litro de combustible, alegando que es necesario para fines sociales y la construcción y conservación de carreteras”.
Además de lo dicho, todo indica que el Gobierno canario se propone incrementar en un 55 % el impuesto sobre el gasóleo a los transportistas y agricultores de las islas. En este caso, la denuncia ha venido motivada por la Federación de Empresarios de Transportes de Canarias (FET). En un comunicado, la FET asegura tener información de que el Gobierno tiene previsto aprobar un anteproyecto de ley que elevaría la fiscalidad aplicable al combustible que utilizan dichos colectivos. El aumento pasaría de los actuales 71,8 euros por cada 1.000 litros de combustible hasta los 155,40 euros.
La FET asegura que seguirá reivindicando recibir «el mismo trato fiscal en materia de combustibles que los sectores marítimo o aéreo, en los que el impuesto es cero«. La federación pronostica que, de producirse el incremento de la presión fiscal que pretende el Gobierno Canario, “los transportistas abonarían en concepto de impuestos unos 16 millones de euros más al año”.