La autorización de los camiones con peso máximo autorizado de 44 toneladas fue otro de los temas estrella abordados en el Foro de AECOC. Las patronales de transportistas presentes en el debate coincidieron en rechazar la autorización de las 44 toneladas por el aumento de la oferta actual de transporte que supondría y la dificultad de asumir los costes que conllevaría.

Ovidio De la Roza expuso que la mayoritaria del CNTC es contraria a adoptar las 44 toneladas porque “el sector no puede afrontar la medida desde el punto de vista de incremento de oferta y la inversión a la que hacer frente”. Además, califica de  “incompresible” que se creen fronteras para el transporte dentro de la UE por no tener una postura común en este asunto.

A pesar de haber retomado recientemente las reuniones con los transportistas, AECOC sigue manteniendo una visión contraria sobre este asunto. Así lo expuso Eugenio Vila asegurando que “más de la mitad de los países del Euro ya permiten las 44 toneladas, por lo que es tema que se nos viene encima y hay que tomar decisiones y no estar impasibles”. Según la patronal de cargadores, aumentar las capacidades de carga en el transporte conllevaría un beneficio de 4.000 millones de euros en eficiencia e incrementaría la productividad en un 10%.

Prueba piloto en Cataluña, “churro y vergüenza”
Marcos Montero, presidente de CETM, también aludió para negarse a modificar los pesos y dimensiones actuales a la falta de capacidad de inversión del sector para hacer frente a las 44 toneladas. Asimismo, calificó la experiencia piloto realizada en Cataluña con las 44 toneladas de “churro” y “vergüenza” porque “sólo ha beneficiado a poco más de 200 vehículos y 70 empresas”.

XIV Foro Nacional del Transporte de AECOC

Montero también se pregunta quién se beneficiará del ahorro del 11% que, según señala AECOC, aportaría las 44 toneladas, si el transportista o el cargador. En su opinión el mayor beneficiario sería este último y el transportista no podría aplicar a los precios el aumento de los costes que tendría la modificación de pesos y dimensiones. Tampoco comprende la insistencia de los cargadores para que se permita las 44 toneladas “cuando ahora hay un 25% de flota parada o arruinada por la crisis”.

Ramón Valdivia, director general de Astic, admite en su intervención en el debate que Astic es partidaria en líneas generales de las 44 toneladas pero también desconfía de un simple acuerdo con los cargadores para el reparto de los costes que supondría tomar esta medida para los transportistas.

En este asunto Joaquín del Moral, director general de Transportes Terrestres, reconoció que Fomento no tiene definida aún una posición. Estamos, señaló en el Foro AECOC, “tratando de integrar todas las opiniones de las partes afectadas, porque los cargadores deben ganar en competitividad en sus costes logísticos pero, por otra parte, es verdad que los transportistas no pueden asumir un modificado de pesos que aumentaría la oferta de mercado y también tendrían dificultad para traspasar los costes a sus clientes”.

Asimismo, del Moral considera necesario analizar el efecto que la autorización de camiones de 44 toneladas tendría sobre la seguridad vial y su impacto en la conservación de las carreteras.