Guardia Civil y Mossos estrenan los nuevos dispositivos que permiten controlar a distancia los tacógrafos
El próximo 31 de diciembre es la fecha tope establecida por la Unión Europea para que todos los vehículos que operan en transporte internacional sustituyan sus viejos tacógrafos analógicos o digitales no inteligentes por los nuevos dispositivos inteligentes de segunda generación.
En esta “hoja de ruta” diseñada para el transporte internacional a partir del 21 de agosto de 2025 todos los tacógrafos inteligentes de primera generación deberán ser retirados y sustituidos por tacógrafos inteligentes de segunda generación, al tiempo que a partir del 1 de julio de 2026 todos los camiones nuevos entre 2,5 y 3,5 toneladas también estarán obligados a incorporar este tipo de tacógrafos.
Por otro lado, desde el 1 de enero de 2025 los transportistas deberán conservar durante 56 días los documentos que acrediten en los controles e inspecciones cuál ha sido su actividad durante esos días, un plazo de tiempo que de acuerdo con la normativa europea duplicará los 28 días actuales.
En su caso los conductores al volante de vehículos equipados con tacógrafos digitales o tacógrafos inteligentes no tendrán que prestar atención a esta nueva medida, dado que la memoria de estos dispositivos abarca unos seis meses.
Tacógrafos para “cazar” a distancia
A partir de ahora los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC) van a poder olvidarse de los tradicionales métodos “artesanales” de inspección, porque podrán controlar a distancia y de forma selectiva los tacógrafos inteligentes de camiones y autobuses sin necesidad de sacar a los vehículos de la carretera.
Para conseguirlo el Ministerio del Interior les ha dotado de una treintena de dispositivos de teledetección remota de corto alcance (DSRC). Estos aparatos van a permitir que los agentes puedan “inspeccionar” a los vehículos en movimiento y con ello detectar todo tipo de infracciones, incumplimientos y manipulaciones. Anotar que estos dispositivos DSCR no permiten controlar a los vehículos que incorporan tacógrafos con menor nivel de inteligencia.
Por último, para que estos controles puedan resultar más exhaustivos y eficientes el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha desarrollado un software propio de carácter específico que facilita a los agentes el acceso y la interpretación de las incidencias y de los datos obtenidos de los tacógrafos inteligentes, que para permitir el intercambio a distancia de información incorporan su correspondiente antena.
Como establece la normativa de protección de datos en ningún caso las informaciones obtenidas por los agentes podrán ser de carácter personal y deberán limitarse a los datos de conducción registrados en los dispositivos embarcados.
Los Mossos también se apuntan
Por su parte y financiados también con fondos europeos Next Generation, los Mossos d´Escuadra han estrenado en Catalunya un total de ocho dispositivos de teledetección de tacógrafos en ruta, unos dispositivos que son similares a los suministrados a la Guardia Civil.
El principal objetivo de los Mossos será controlar de forma más exhaustiva el tránsito de camiones por la AP-7, una vía donde desde la desaparición de los peajes el tráfico de camiones pesados se ha incrementado un 80%.
Como sucede en el caso de la Guardia Civil estos nuevos dispositivos DSRC pueden cumplir con su labor instalados de forma permanente en el interior de un coche policial o pueden colocarse sobre un trípode en cualquier punto de la red viaria. Una vez comprobado que el vehículo objeto de control ha cometido algún tipo de infracción los agentes pueden optar por detener, sancionar o incluso proceder a la inmovilización del vehículo.
Además, a esta nueva tecnología de teledetección de tacógrafos se unirán los controles digitales que el Govern tiene previsto instalar en la AP-7 y en la C-33. En el caso de la AP-7 dichos controles entrarán en servicio a comienzos del próximo año y estarán instalados en los antiguos peajes de La Jonquera, Roca del Vallés, Martorell y Camp de Tarragona, mientras que en la C-33 los nuevos controles se instalarán en el peaje de La Llagosta.
Este innovador sistema digital de control de vehículos de transporte permitirá detectar, entre otras infracciones, manipulaciones en los tacógrafos, excesos de peso y niveles de emisiones irregulares.
Cuando se detecte una infracción las cámaras de estos sistemas de control digital grabarán la matrícula de los vehículos y en un panel situado unos metros más adelante se pedirá a los conductores que se detengan para que los Mossos puedan proceder a la inspección de los vehículos.