El pasado 10 de febrero un pequeño grupo de transportistas cooperativistas inició una huelga de hambre junto a la Consejería de Transportes de la Comunidad Valenciana para protestar por la nueva orden que prepara el ministerio de Fomento para la obtención y trasmisibilidad de las tarjetas de transporte, y que, en líneas generales, restringe el acceso a la actividad si no se dispone de un mínimo de tres vehículos con una antigüedad inferior a cinco meses.

Tras la entrada en vigor de la nueva LOTT, el ministerio ha actualizado la referida orden con el fin de su adecuación a la nueva legislación. Con la nueva normativa, independientemente del número de vehículos que tenga el que abandona el sector, el comprador de la tarjeta de transporte necesitará un mínimo de tres vehículos. Con esta modificación, “en la práctica el valor patrimonial que tenían las autorizaciones de transporte se queda en cero porque quién va a comprar una autorización si te obligan a tener un mínimo de tres vehículos”, se señala desde Fenadismer.

Disposición transitoria
El proyecto recoge unas medidas excepcionales y temporales para que los socios de cooperativas puedan acceder a la obtención de tarjetas de transporte a través de la creación de empresas. Para ello, se les exime del requisito de antigüedad de los vehículos de hasta un máximo de cinco meses que se exige para al resto de empresas o profesionales.

Con esta excepción, los cooperativistas que quieran crear una mercantil de transporte pueden aportar los vehículos que tienen en la cooperativa que abandonan, independientemente de la antigüedad de los mismos. En cualquier caso, tiene que ser un mínimo de tres vehículos. No obstante, esta excepción tendrá una duración muy limitada, hasta el 30 de junio. Dado que la previsión es que la nueva orden entren en vigor en abril, el plazo que se concede para que los cooperativistas que lo deseen se transformen en sociedad mercantil es muy corto, de apenas dos meses.

El comprador de la tarjeta de transporte necesitará un mínimo de tres vehículos

Fetransa se opone
Dentro del CNTC, Fetransa ya ha mostrado su rechazo a esta nueva norma, ya que cree que exigir poseer tres vehículos al adquiriente para poder transmitir la autorización de transporte supone una gravísimo perjuicio para los transportistas autónomos. Este requisito se suma a los de la antigüedad de 10 años de la autorización, de no haber reducido flota en los dos años anteriores y al de que el adquirente disponga del título de competencia profesional, lo que supone una patente discriminación al transportista autónomo.

Por su parte, desde la agrupación de Cooperativistas de Transportes de la Comunidad Valenciana, promotores de la huelga de hambre, además de rechazar también las nuevas exigencias de transmisibilidad de tarjetas de transporte, exigen que el socio cooperativista que carezca de tarjeta de transporte pueda facturar a la cooperativa los servicios prestados, y ésta al cliente final.

Hay que recordar que esta posibilidad ha estado funcionando especialmente en la Comunidad Valencia en los últimos años (provocando que el sector las denomine «falsas cooperativas«), pero ya no es posible con la nueva LOTT al exigir que cualquier transportista que realice factura tenga su título de transporte para evitar fraudes.

Fomento pretende limitar la transmisión de tarjetas de transporte

Reunión con la consejera de Transportes
Para intentar solucionar buscar soluciones, está prevista una reunión entre los promotores de la huelga y la consejera de Transportes Valenciana, Isabel Boning. Según el colectivo Alternativa Motor y Deporte (AMC), integrante de la Agrupación de cooperativistas de Transportes de la Comunidad Valenciana, las medidas de la LOTT afectan a unos 6.900 transportistas valencianos vinculados a 400 cooperativas.

Además, el diputado del grupo Compromis en las Cortes Valencianas, Juan Baldoví, ha trasladado una “petición de auxilio” a la ministra de Fomento, Ana Pastor, en la que los cooperativistas valencianos sin tarjetas de transporte señalan que la modificación de la LOTT “nos ha dejado fuera de marco legislativo y nos ha arrojado a la incertidumbre y ambigüedad legal actual”.

También recuerdan que la orden ministerial que permitía el acceso al sector a autónomos individuales con un solo camión fomentó desde el año 1987 las cooperativas gestoras de servicios que cedían las autorizaciones a estos transportistas que desarrollaban la actividad bajo su nombre. Por ello, en la actualidad “nuestro problema es que somos porteadores pero sin tarjeta, lo que no está provocando una agonía económica”. Por ello, piden a la ministra de Fomento que “se nos concedan las tarjetas de transporte a nuestro nombre y así poder seguir trabajando como hasta ahora lo habíamos hecho sin estar sometidos a cooperativas que lo único que buscan es seguir lucrando con nuestra desgracia”.

«Entraron por la puerta de atrás»
Ante esta polémica, Ovidio de la Roza, presidente del CNTC, ha señalado a Infotransport que “al sector cooperativista esta nueva norma ministerial ni les va ni les viene, pero a los que no les ha sentado bien es a los fraudes cooperativistas”. En su opinión, el problema es con los transportistas que “entraron en el sector por la puerta de atrás y están ejerciendo ilegalmente la actividad”. Así, considera que ahora se les da una oportunidad para juntarse tres socios con tres camiones y crear una empresa pero “si no lo aceptan es su problema, desde luego el sector no les va apoyar”, se muestra tajante.