Juicio por la ultractividad del convenio de transporte de Barcelona
Durante la celebración el pasado jueves 4 de diciembre del juicio por la demanda de conflicto colectivo presentada por CCOO y UGT contra las organizaciones patronales Transcalit y ACET-UNO Catalunya por la ultractividad del convenio colectivo del sector de transporte de mercancías por carretera y logística de la provincia de Barcelona, los abogados de las patronales basaron su argumentación en reiterar que las negociaciones con los sindicatos estaban rotas desde noviembre de 2011.
Según el sindicato CCOO, esta fecha que señalan las patronales corresponde con el momento de la primera convocatoria de huelga en el sector, que finalmente desencadenó el acuerdo de eficacia limitada con ACET-UNO. Sin embargo, para el sindicato esta afirmación de los abogados de las patronales carece de base jurídica y real, ya que de ser así el sindicato se pregunta “qué hemos estado haciendo y de dónde han salido las múltiples actas de reuniones firmadas por ambas partes celebradas durante 2013”.
De la documentación aportada en el juicio, en opinión de los sindicatos queda claro que no sólo se reanudaron conversaciones y negociaciones con posterioridad a noviembre de 2011, sino que, además, la postura patronal ha sido “un continuo chantaje en el que estaban convencidos de tenerlo todo ganado”, especialmente desde la promulgación de la reforma de la negociación colectiva. De hecho, José Villares, responsable de carretera de CCOO Catalunya, asegura que en una de las reuniones de la mesa de negociación un asesor patronal llegó a decir literalmente que “si no queréis ceder en la mesa, ya llegará el 8 de julio”, momento en que según su opinión vencía la ultraactividad del convenio de mercancías de Barcelona.
Situación de bloqueo
Con su postura ante los magistrados de la sala de lo social del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, los sindicatos reiteran que una vez más el bando patronal mantiene la situación de bloqueo que han desarrollado durante todo el proceso negociador, “desde sus inicios, cuando divagaban sobre el alcance de sus respectivas representaciones hasta la famosa fecha del 8 de julio de 2013, en que según las interpretaciones de Transcalit y UNO vencía el convenio”, recuerda José Villares.
Con este panorama, CCOO entiende que el camino jurídico será largo, porque si las patronales no obtienen una sentencia favorable, recurrirán al Tribunal Supremo “siempre con la intención de entorpecer e impedir precisamente que nos sentemos a negociar y con su esperanza puesta en una nueva vuelta de tuerca por parte del legislador, que precisamente ya ha anunciado una revisión de la reforma laboral para hacerla todavía más regresiva y dura”, recalca el sindicato.