Cataluña y la Euroviñeta, entre la ilegalidad y la competencia desleal
A mediados del 2013, la Generalitat de Cataluña sorprendía al anunciar su intención de aplicar a todos los vehículos de más de 12 toneladas un pago por el uso del Eje Transversal (carretera C-25) a partir del segundo semestre de 2014. La Generalitat informaba haber sometido a información pública el Decreto que le permitía incorporar la Directiva Europea sobre la Euroviñeta (pago por el uso de determinadas infraestructuras), mediante la publicación de un edicto en el Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC).
Para justificar los requisitos que exige Bruselas para implantar una medida de este tipo, Cataluña asegura que los ingresos generados por la Euroviñeta se destinarán al desarrollo y mejora de las infraestructuras y el sector del transporte, además de al fomento de una movilidad más sostenible. La Comunidad Autónoma hace suyo el planteamiento de «quien usa paga y quien contamina, también”.
Motivación de la medida
Según lo dispuesto, la medida se aplicará en el Eje Transversal en una primera fase “porque esta vía será desdoblada, por lo que previsiblemente se consolide como itinerario de paso de vehículos pesados entre el centro peninsular y Francia”, aseguraba el comunicado oficial. El Eje, que se financia con un peaje “en la sombra” a cargo de los presupuestos públicos, ha llegado a cotas de entre 2.500 y 3.000 camiones al día de media, lo que supone entre un 22% y un 25% del tráfico total de la vía, ha destacado.
El Gobierno catalán se plantea extender la medida a otras autopistas o carreteras de alta capacidad en Cataluña en fases posteriores. Mantiene, asimismo, las dos modalidades alternativas de tarifación recogidas en la directiva europea -en función de la distancia recorrida y del tiempo de utilización de la vía-, lo que se concretará en el momento de aplicación efectiva de la norma.
No hay marcha atrás
Las críticas del sector a la Euroviñeta se multiplicaron cuando, lejos de dar marcha atrás ante las protestas, la Generalitat sigue adelante y publica una disposición -el pasado 30 de enero en el Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña- la ley 2/2014 por la que se regula la tasa por el uso de los vehículos pesados de más de 12 toneladas en la carretera C-25. Concretamente serán 152 kilómetros los que se verán afectados por una medida que será efectiva a partir del próximo día 2 de septiembre.
El Decreto que regula la nueva tasa establece la cuota correspondiente a cada tramo y a cada clase de vehículo pesado. Y es que, como sucede en el resto de países que tienen implantada esta medida, no abonarán lo mismo unos vehículos que otros. La cuota variará según la categoría de emisiones, de forma que la cantidad a pagar vendrá determinada tras multiplicar la base imponible del tramo en cuestión por 0,115 y por el coeficiente de modulación correspondiente a la clase de vehículo y categoría de emisiones. Además, para aquellos que utilicen un servicio de pago a través de telepeaje, tendrán una bonificación de hasta el 10% de la cuota.
Protestas y denuncias
La Confederación Empresarial de Transportes de Carretera de Catalunya (Cetcat) exige que no se aplique la Euroviñeta argumentando que Bruselas no obliga a su aplicación, “de hecho España, el Ministerio de Fomento, mantiene su negativa a esta medida y ello no implica incumplir la legislación comunitaria”, explican en un comunicado.
Cetcat no se cree, como plantea la medida, que los ingresos reviertan en el sector del transporte, “para lo único que servirá es para pagar el coste que ha tenido el desdoblamiento del Eix Transversal. Será un impuesto más, para un sector que ya paga suficientes para las infraestructuras que utiliza”, puntualiza.
La propia CETM, a la que pertenece Cetcat, lamenta el incumplimiento de la Generalitat, que a pesar de afirmar que contaría con la opinión del sector, “no se ha realizado ningún estudio previo del impacto que tendrá para el sector. Además, estamos convencidos de que imponer esta tasa en el Eix Transversal, no es ni viable ni rentable«.
Denuncia de Fenadismer en Europa
Fenadismer formalizó el pasado 3 de abril una reclamación ante la Comisión Europea con motivo de la aplicación de la Euroviñeta en Cataluña. Según la federación, la ley aprobada por el Parlamento de Cataluña vulnera manifiestamente las Directivas europeas sobre tarificación por el uso de las carreteras por los vehículos de transporte (Directiva 1999/62/CE y posteriores modificaciones).
La medida de Fenadismer no parece desorbitada si se tiene en cuenta que la legislación comunitaria no permite a una comunidad autónoma implantar una medida de estas características. En otras palabras, sólo el gobierno central estaría en disposición de implantar la Euroviñeta si así lo considera, al menos así lo establece la Directiva Comunitaria: que cada país tiene libertad para su implantación.
Por todo ello, Fenadismer ha solicitado a la Comisión Europea “que analice su adecuación a las Directivas europeas y, en su caso, que se introduzcan las modificaciones que sean necesarias para ajustarse a la legalidad vigente, antes de que la tasa sea puesta en marcha en la citada vía”, asegura en un comunicado.
Parecidos argumentos han sido repetidos por los dirigentes de otras asociaciones nacionales como CETM y Astic. Todos coinciden en que Cataluña no tiene potestad jurídica para implantar una medida de este calado, “el gobierno central deberá tomar cartas en el asunto y no permitir que salga adelante. No es legal y no se puede permitir”, afirmaba el presidente de Astic recientemente.
Asimismo, de implantarse, primero en el Eje Transversal y probablemente en otras carreteras catalanas, se produciría un nuevo ataque contra la unidad de mercado y la competencia. Y es que surge una pregunta, ¿Ofrecerá Cataluña ventajas adicionales, como ha hecho Reino Unido, a los transportistas catalanes?. Dicho de otro modo, ¿implantará una doble tarificación más benévola para los de “casa”?
Muchas preguntas en el tintero, dudas e incomprensión. Eso sí cada vez queda menos tiempo, sin que parezca que el gobierno central esté adoptando medidas en contra de la aplicación de esta nueva tasa.